Camino sinuoso.

Le dije a mi amigo:
“Tienes que caminar en contra del transito
al medio de una avenida de dos sentidos,
montar una escena funambulesca,
estar enamorado hasta el cuesco;
solo ahí veras las calaveras de los choferes
que van veloces en sus autos vampiros,
solo ahí veras los cocodrilos galácticos
del verdadero fin”

¿Por qué?
Es el efecto secundario
de las notas verdes de sus ojos fragorosos,
sus rucios cabellos de Barbie
cayéndole liso el mechón sexy
jugando con sus labios pálidos
surcando su mejilla rubia.

Lo cierto es que no tengo miedo.
Podría ser una katana esta línea blanca sinuosa
o la grieta de un terremoto que sangra lava,
no tengo miedo;
levanto la botella hacia mi boca
para intentar sacarle la sed que deje adentro,
solo cae cerveza tibia,
un asco patético.

"Van y van los autos en el río"♫♪♫♪ 
Mostrando sus colmillos
y dándole a la bocina gutural
-mi amigo va por la vereda-
fumando su cigarrillo,
tirando los cartuchos marca Derby
con estelas de ceniza inflamada
a las ruedas
-como un perro que fingía rebeldía-

El solo me miraba,
miraba al funambulista,
al enamorado,
al loco,
yo el loco;
lo más cerca que estará de ver al sistema tirando códigos errados,
cero por cero en la calculadora.

Creo que grite que la amo,que estoy aquí por...
Ella
Ella
Ella

¿FATUM?
Lo cierto es que no tengo miedo
de probar
que las cosas pasan por que sí.

Mi amigo me dijo:
“Las cosas pasan,¿Por qué no?”